¿Pinocho?

¿Pinocho?
De ningún modo, es el canshapito posando con una su mascarita de parachiquito

lunes, 25 de abril de 2011

El Canshape


 
Pacto incongruente

Uno escribe para evitar ser tan invisible como nos piensan... Se acuerda usted del tan criticado pacto de cobertura informativa de la violencia en México promovido por Televisa en su segunda edición de Iniciativa México, que busca evitar, entre otras cosas, en su decálogo de criterios editoriales, el uso de un lenguaje que convierta a los delincuentes en personajes admirables, en héroes públicos, o que se presenten escenas que hagan una apología al narco como el medio para alcanzar poder económico y político.
Pues bien, resulta que es precisamente Televisa, a fuerza de no tener desde hace tiempo producciones creativas que satisfagan el gusto de un público cada vez más exigente, la que incumple con lo propuesto al mantener en su programación telenovelas como La reina del sur, producida por Telemundo y transmitida por Canal 9, Galavisión, por cadena abierta.
La historia basada en la novela de Arturo Pérez-Reverte nos cuenta la vida de Teresa Mendoza (Kate del Castillo), quien tras la muerte de su pareja, piloto aéreo de narcotraficantes, construye un poderoso cártel de drogas en Europa.
Si bien el pacto no es obligatorio, por lo menos es incongruente el proceder de la televisora que signó parámetros éticos específicos en este acuerdo nacional, que no está demás recordar le valió la crítica de los grupos periodísticos ajenos a la empresa que vieron en él la estrategia para legitimar la guerra emprendida por el gobierno federal o por lo menos minimizar los daños colaterales de la misma.
Estos comentarios tienen sustento en la observación hecha este domingo por Héctor Villareal, subsecretario de Normatividad de Medios de la Subsecretaría de Gobernación, lo que hace suponer no un apercibimiento al socio más activo de la guerra, sino un recordatorio a los que firmaron el acuerdo y poco a poco, debido a la propia dinámica de lo inocultable, han ido olvidando el dichoso decálogo.

Pongosh
Lo cumplí: guindé mi hamaca yucateca bajo la sombra espesa de un huanacastle bicentenario en la ribera del río de Las Mercedes en Suchiapa. Bajo el ala ancha de mi nuevo sombrero indiana: yo y una michelada// Si usted, al igual que otros muchos ciudadanos, no pagó los servicios básicos como el agua y la luz, el internet y el cable, incluso su renta o las tarjetas, para tener dinerito extra en estas vacaciones de Semana Santa y poder salir de la rutina diaria, lo felicito porque acaba de salvar su vida, ya que el mucho estrés puede provocarle un paro cardiaco, por decir lo menos, ahora sí que lo bronceado nadie se lo quita, pero bueno, es hora de volver a la realidad y enfrentar los compromisos como la persona honorable que seguramente es, por lo que le recomiendo hacer un plan de austeridad con la familia, para que todos participen y en breve puedan regularizar su economía// Por más mundano que se sea, uno no puede evitar agradecer la gran fortuna de ser beneficiario de ese eterno sacrificio que realizó el hijo de Dios, Jesucristo, no en la cruz, que si martirio no deja de ser sólo castigo al cuerpo, sino al tomar sobre sí todos los pecados del mundo, la expiación, cuando la copa fue tal que derramó sangre por cada poro del cuerpo y tuvo que recibir consuelo angelical. Doy gracias// De nueva cuenta volvemos a las prisas de la vida cotidiana, a los temas de diario, veremos qué pasará con los pleitos públicos, dimes y diretes políticos, denuncias ciudadanas, libros, películas, canciones, anécdotas; lo afanes de cada día, pues, mientras haya vida// Si el burro tocó la flauta, usted, por favor, lea un libro, de lo que sea, hombre, mujer, tampoco nos pondremos exigentes// No redondee su cambio en las tiendas de autoservicio, que ellos paguen completos sus impuestos// Recuerde que El Canshape es un sitio encantado de Tuxtla Chico//


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roraquiar@hotmail.com
961 111 58 69

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