Responsabilidad social universitaria
Aprender y enseñar constituyen la esencia de la vida universitaria, experiencia que por sí misma es inagotable y en permanente renovación. Sin embargo, esta riqueza no alcanzaría relevancia plena sin la vinculación con la sociedad y sus necesidades. Pues es esta inserción social y las responsabilidades que se derivan de ella las que permiten la configuración de una identidad universitaria genuina. En Chiapas, la Unach es quien representa por antonomasia, al ser la máxima casa de estudios, y quizá por obligación moral, la punta de lanza en la responsabilidad social de esta naturaleza. Ante ello destacan las adecuaciones de sus programas de estudio y de vinculación en congruencia con las políticas públicas implementadas durante el actual periodo de gobierno. Y aunque resulta evidente que la primera función social de la universidad es formar profesionales de excelencia y al mismo tiempo personas éticamente concernidas, es en gran medida su responsabilidad, también, brindar las oportunidades de estudio a los jóvenes de todas las regiones del estado. Por ello resulta pertinente la reducción de las cuotas por expedición de fichas (de mil 500 a 500 pesos) para el módulo introductorio de las licenciaturas ofertadas en la modalidad a distancia a través de la Universidad Virtual, anunciada este miércoles por el rector Jaime Valls Esponda, con lo que se beneficiarán particularmente los habitantes de los municipios con menor índice de desarrollo humano, indígenas, madres solteras, embarazadas y personas con alguna discapacidad.
Los Chimalapas
En su faceta de analista político, el diputado presidente de la Mesa Directiva del Congreso del estado, Zoé Robledo Aburto, apunta en cápsula editorial del programa televisivo Informativo 40 que a la región de Los Chimalapas se le ha tenido presente durante las últimas cuatro décadas por recurrentes conflictos agrarios derivados del aprovechamiento de los recursos naturales. No obstante, la posición de Chiapas en todo este tiempo ha sido clara: no se trata de una disputa por límites geográficos, ya que en 1824 cuando los chiapanecos decidieron federarse a México, lo hicieron por todo su territorio, sin quitarle un ápice al país y por ende tampoco a Oaxaca; es decir: los límites y fronteras chiapanecos están claramente definidos. No obstante, reconoce, el desafío consiste en acercar el gobierno a esa región desatendida, de ahí que calificara de inteligente la iniciativa del gobernador Juan Sabines de crear un nuevo municipio en la zona, que focalice la inversión pública y agregue una perspectiva política, institucional y de cohesión social hasta ahora ausente.
Desaparecido en la Lacandona
Un estudiante de la Facultad de Biología de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) se extravió en la Selva Lacandona. José Andrés Camilo Ibarra, de 24 años de edad, presuntamente se perdió en el campamento ecoturístico Yatoch Barum —de la conocida familia Vicente Kin Paniagua—, específicamente en la localidad de Lacanjá Chansayab de Ocosingo. Familiares y amigos del universitario difundieron la noticia el 09 de noviembre a través de las redes sociales Facebook y Twitter. El usuario @Diegot30 reportó: "el día de hoy se perdió, el director de su universidad la BUAP le habló a su familia para que fueran para allá, somos de Puebla y no sabemos qué hacer, me podrías ayudar a pasar la información en los medios para que la gente de allá me ayude a buscarlo? ayúdame por favor Dios te lo va a recompensar".
Lobo canadiense en Chiapas
Elementos de la Brigada de Vigilancia Animal (BVA) de la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal (SSP-DF) resguardaron y protegieron a un lobo canadiense, especie en peligro de extinción, que entregó una persona procedente de Tapachula, Chiapas. El ciudadano pretendió donar al animal porque, según dijo, ya no podía mantenerlo y no contaba con el espacio adecuado para su estancia, informó la policía capitalina en un comunicado. El lobo, de año y medio de edad, fue un regalo de cumpleaños para su hija y aseguró que contaba con los permisos respectivos, aunque no los mostró. En una estrecha jaula y en su camioneta lo llevó a la Ciudad de México y lo entregó a los médicos veterinarios en Tlaxcoaque, donde momentáneamente lo resguardaron, alimentaron y dieron los primeros cuidados de salud para luego entregarlo a la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa).
Pongosh
Él tenía un trabajo de perro, y no es que yo despreciara su actividad: debía conducir a un anciano ciego, cascarrabias, a todas partes, y como también perdía el oído, cuando él le hablaba, el senil personaje sólo escuchaba una especie de ladrido perdido y le daba por propinar indiscriminadamente periodicazos al hocico de su lazarillo//Más bien sus rasgos eran finos: bajo sus párpados achinados se ocultaban ojos claros y confiables, su nariz era más bien una pequeña bola de carne al centro de una bandeja de plata pulida, y nada de lo que yo hubiese visto hasta entonces se podía comparar con su sonrisa. No obstante, no era su elemental buena salud humana lo que destacaría de ella, sino su luz interior, preservada por una falta de experiencia que al parecer siempre la había aislado, que hacía pensar que se hablaba de sexo frente a una niña ruborizada, desnuda// Recuerde que El Canshape es un sitio encantado de Tuxtla Chico…
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